El Reflejo Camino todas las mañanas por el mismo sendero al borde del lago. Me gusta el silencio, el aire fresco que huele a tierra mojada, y la sensación de que todo está en su lugar. Pero últimamente, cada vez que paso por el lago, algo extraño me sucede: veo a alguien en el reflejo del agua, una figura que camina a mi lado, idéntica a mí. La primera vez que ocurrió, pensé que solo era mi sombra, pero luego noté que había algo diferente. Su ropa era idéntica a la mía, pero un poco más desgastada. Su andar era el mismo, pero parecía cargar con un peso invisible. Me detuve y miré fijamente el reflejo, esperando que desapareciera. Sin embargo, no se fue. Se quedó allí, con una mirada que me erizó la piel. Desde entonces, cada día al pasar por el lago, ahí está. Nos miramos fijamente, y aunque intento ignorarlo, esa figura, que soy yo pero no lo soy, parece atrapada, buscando liberarse. Hoy he decidido confrontarlo. Me inclino sobre el agua y le hablo: "¿Qué quieres de mí?" P...